A todos los que nos contempláis en esta noche de Martes Santo

¡COGE TU CRUZ Y SÍGUEME!

Miras la cruz de Cristo, esa cruz que impone silencio, una cruz que arranca el silencio y el Perdón de tu interior. Una cruz sencilla, humilde, sin adornos. Una cruz anónima, una cruz que son muchas cruces.

Tu cruz es la de Cristo, pero ¿Te has preocupado con cargar con la cruz?, ¿Has asumido tu cruz?, ¿Es la cruz un signo de tu alegría o de tu sufrimiento?

Hoy Martes Santo ÉL quiere ofrecerte su cruz, su vida y su Perdón. Morir en la cruz no es el final de nada sino el principio de todo. ¡No sigas a la cruz de la muerte, sigue a la cruz de la vida!

Cada uno tiene su cruz y al paso del Perdón esa cruz, tu cruz será menos pesada, pues ÉL quiere cargar con ella. En medio del sufrimiento, de la pena, en medio y soportando una cruz pesada siempre está la esperanza de Cristo.

Hoy Martes Santo un grupo de hermanos anónimos, que se han negado a sí mismos, han cogido su cruz, las de sus preocupaciones, la de su dolor y la llevan con Cristo. Hoy quieren soportar la cruz, pero también ayudarte a llevar la tuya. Sólo mira al crucificado y verás que su cruz es la cruz del mundo y sus manos quieren hoy Martes Santo y siempre abarcar a todas las cruces del mundo.

Los Hermanos del Perdón queremos que lo sientas, que lo veas, que lo escuches pero no sólo a Cristo. Queremos que sientas la cruz del hermano, la cruz de tu prójimo. Esa cruz que carga y que hace muy pesada su vida. Queremos que hoy Martes Santo cojas tu cruz y nos sigas y que también cojas la cruz de tu hermano.

¡Ayuda a llevar la cruz! Cuántas cruces hay en el mundo que puedes ayudar a cargar ¿Te lo has planteado?

Al Cirineo le obligaron a ayudar a Cristo para cargar con su cruz. Hoy Martes Santo los Hermanos del Perdón te pedimos que nadie te obligue a cargar con la cruz de tu hermano, de tu prójimo.

Hoy Martes Santo, tú que nos lees, tú que nos escuchas, tú que nos ves, tú que nos sigues, que seas tú el que voluntariamente y por AMOR y PERDÓN ayudes a tu prójimo a llevar su cruz. ¿Cuántas cruces puedes ayudar a llevar y aún no lo sabes? Es el momento de la cruz, de su cruz, de las grandes y pequeñas cruces de este mundo. Hoy es un buen momento para seguir a la cruz, cargar con ella y PERDONAR. ¡COGE TU CRUZ Y SÍGUEME!

“Y a todos decía: Quien quiera seguirme, niéguese a sí, cargue con su cruz cada día y venga conmigo” Lucas 9,23